A veces, la imaginación supera a la realidad... o no.

lunes, 21 de noviembre de 2011

Una anciana intenta votar un día después de las elecciones y agrede a un policía

Una mujer de 77 años, M. A. G., agredió ayer a un agente de la Policía Local por no dejarle votar un día después de las elecciones ya celebradas. La anciana se dispuso a ejercer su derecho al voto como cualquier otro ciudadano; sin embargo, no se percató de que la fecha ya había pasado. Los hechos ocurrieron en la barriada de El Naranjo en torno a las 09:00 cuando la agresora irrumpió en una clase de preescolar, se sentó en una mesa vacía y rellenó una página de un cuaderno de uno de los escolares sorprendidos. Acto seguido, dobló el papel y  al ver que no había urna, se encaró con la profesora, quien intentó convencerla de que la fecha de las elecciones ya había pasado. A pesar de los continuos intentos del equipo docente del centro, la atacante esgrimió su paraguas y amenazó a todos los allí presentes. Ante esta situación, el conserje del colegio José de la Torre y el Cerro alertó a la policía, que se desplazó al lugar indicado.
Los efectivos también intentaron disuadir a M. A. G., pero al ver que no cejaba en su empeño de votar, los policías intentaron sacarla por la fuerza. A pesar de la avanzada edad de la agresora, ésta logró zafarse de los agentes y asestó un golpe a un policía, que más tarde tuvo que ser intervenido en el Hospital Universitario Reina Sofía por una fuerte contusión en la cabeza.
La solución llegó de las manos de uno de los alumnos más pequeños, que, haciendo uso de una caja donde guardaban ceras y rotuladores, convenció a la atacante de que esa era la supuesta urna y que todo era parte de una broma. Después de los momentos de tensión y de varias crisis de ansiedad, la agresora desalojó el centro educativo.
Mientras tanto, UGT señaló al respecto que se trata de un caso más de abusos hacia los profesores en la provincia, por lo que "tomará las medidas oportunas" para que estas situaciones no se repitan.

miércoles, 11 de mayo de 2011

Una decena de caballos vigilarán las explotaciones agrarias de la provincia

Los agricultores y ganaderos de la provincia ya duermen un poco más tranquilos después de conocer durante el día de ayer que 131 efectivos de la Guardia Civil se dedicarán exclusivamente a la vigilancia de sus fincas. Estas unidades están formadas por 48 unidades territoriales específicas, 35 efectivos del Seprona y 20 unidades de la Reserva de Comandancia. Además, contarán con un refuerzo procedente de Madrid compuesto por una treintena de agentes de la Agrupación Reserva y Seguridad (ARS) y ocho caballos del Escuadrón de Caballería. Esta medida, enmarcada dentro del Plan contra el Robo en Instalaciones Agrícolas y Ganaderas, pretende hacer frente al incremento de este tipo de delitos que se han registrado durante la última campaña, un repunte que preocupa, y mucho, al sector. 
A pesar de la incredulidad de los empresarios del sector, el teniente coronel del instituto armado, José Ignacio Criado recalcó el importante papel de los ocho caballos que se distribuirán sobre todo por las zonas de la Campiña y la Vega del Guadalquivir. "Son nuestros mejores agentes, de hecho, ya han participado en varias intervenciones en varias granjas españolas como infiltrados", explicó Criado.
Según el representante de la Guardia Civil, esta decena de animales pertenecen a una raza especial (Riegestail Collie Rottwailler) que se cría en Alemania desde hace varios años y que se entrena para labores relacionadas con la vigilancia. Cada uno de los caballos llevará un localizador GPS en el cuello que permitirá a los agentes del dispositivo ubicar a los animales en cualquier momento.  
Las asociaciones agrarias Asaja, COAG, UPA y Faeca pudieron conocer ayer las medidas del plan de primera mano en una reunión con los representantes de la Subdelegación de Gobierno, la Junta y la Guardia Civil. Con este dispositivo se intenta dar solución a una situación que llevan denunciando las organizaciones agroganaderas desde hace varios meses. El presidente de Faeca, Salvador de Prado, señaló que "con la participación de estos ocho caballos no sentimos mucho más seguros".